Asistencia veterinaria tras su recepción o haberse detectado algún vicio oculto en el cachorro,
Muchas personas, muchas familias, desean integrar al núcleo familiar a un nuevo miembro, un cachorro. Se tendrán distintas preferencias en cuanto a razas y tamaños dependiendo muchas veces de la que esté de moda en el momento, del espacio del que dispongamos en nuestro hogar o simplemente el ver cumplida así una antigua ilusión.
Las estafas con mascotas suelen “enganchar” al futuro comprador con fotografías entrañables, descripciones morfológicas y genéticas excelentes así como relatos enternecedores. Por lo general incluyen cachorros de perro pero se presentan estafas que incluyen cualquier animal de compañía que busquen las personas, desde gatos, pájaros, animales exóticos, etc.
Pero la compra a distancia también tiene ventajas, como es el poder elegir buenos criadores y buenos ejemplares con todas las condiciones y garantías. A veces, las ofertas pueden “esconder” problemas en muchos casos graves puesto que físicamente, no estamos viendo el cachorro. Se debe desconfiar de precios excesivamente bajos sobre todo cuando se ofertan animales con pedigrí, libres de una determinada patología, hijos o nietos de campeones…
Antes de comprar un cachorro, bien sea a través de internet, en una tienda de mascotas o tratando directamente con el criador, debemos exigir al vendedor todas las garantías de la venta, facturas de compra y cartilla sanitaria/pasaporte del perro, comprobado que todo sea correcto.
La mayor parte de la veces, un minucioso y acertado estudio e investigación de la documentación genealógica, administrativa y sanitaria enviada con el cachorro junto con la valoración de los distintos informes veterinarios facilitados, en casos de que hubiese sido necesaria la asistencia veterinaria tras su recepción o haberse detectado algún vicio oculto en el cachorro, serán de gran utilidad para la elaboración del correspondiente informe pericial veterinario que acompañe al escrito de reclamación.